
Dice Stallman que las entidades del gobierno no deben proteger el software propietario, pues estas entidades están allí para defender lo público. Y le hallo la razón. Stallman defiende la idea de un mundo cooperativo, donde el conocimiento compartido lleva al progreso de las sociedades. Discrimina entoces el conocimiento individual y secreto que promueven las grandes multinacionales como Microsoft. Una cara de la moneda nos muestra Stallman y yo pienso que tiene razón.
Finalmente, se disfrazó de santo para hacer un rito sobre el culto al software libre. Hubo hilaridad entre los asistentes.
Seguramente, Stallman seguirá haciendo reir y mostrando una cara de la moneda a más habitantes del mundo que quieran escuchar sobre software libre.

1 comentario:
¡En la primera foto salgo yo con Stallman!
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